martes, 3 de abril de 2012

34



Rapto de Dina, hija de Jacob

34 1 Dina, la hija que Lía dio a Jacob, saltó un día a ver las mujeres de aquel país. 2 Y Siquem, hijo de Hamao el heveo, príncipe de aquella tierra, la vio y la tomó; se acostó con ella violándola. 3 Quedó enamorado de Dina, hija de Jacob, amó a la joven y le habló de amor. 4 Entonces Siquem fue donde su pade Hamor, para decirle: “Tómame esa joven por mujer.”
5 Jacob supo que su hija Dina había sido deshonrada, pero como sus hijos estaban en el campo con su rebaño, nada dijo hasta que volvieron. 6 Hamor, padre de Siquem, vino a hablar con Jacob. 7 Cuando los hijos de Jacob volvieron del campo, se enteraron de lo que había pasado. Estos hombres se enojaron muchísimo porque se había cometido una infamia en Israel; alguien había abusado de la hija de Jacob, cosa que no debe hacerse. 8 Hamor habló con ellos. Les dijo: “Siquem, mi hijo, está enamorado de la hija de ustedes, les ruego que se la den por esposa. 9 Sean nuestros parientes, demnos sus hijas y tomen las nuestras, 10 quédense a vivir con nosotros: todo el territorio está a su disposición, habiten en él, recórranlo y tomen posesión de él.” 11 Siquem dijo al padre y a los hermanos de Dina: “Les ruego que me perdonen. Les daré cuanto ustedes me pidan. 12 Impónganme un precio y regalos de valor, y yo les pagará lo que quieran, pero denme la muchacha por esposa.”
13 Los hijos de Jacob respondieron a Siquem y a Hamor, su padre. Les hablaron con engaño porque había deshonrado a Dina, su hermana, y les dijeron: 14 “No podemos dar nuestra hermana a un hombre incircunciso; es cosa que tenemos por una vergüenza. 15 Daremos nuestro consentimiento con esta sola condición, que se hagan iguales a nosotros, circuncidando a todos los hombres de entre ustedes. 16 Entonces daremos a nuestras hijas y tomaremos las de ustedes, nos quedaremos con uestedes, y en una palabra, seremos un solo pueblo. 17 Pero si no quieren hacerlo, tomaremos a nuestra hermana y nos iremos.” 18 Estas palabras le agradaron a Hamor y Siquem, su hijo. 19 El joven no tardó en hacer lo que le pedía, porque estaba enamorado de la hija de Jacob y era Siquem el de más prestigio en la familia de su padre.
20 Hamor y su hijo Siquem fueron a la Puerta de su ciudad para hablar a los vecinos reunidos allí. 21 Les dijeron: “Estos hombres son gente tranqula. Que puedan vivier entre nosotros y recorrer libremente el país; que ocupen cuanto espacio necesiten. Nosotros tomaremos por mujeres a sus hijas y daremos a ellos nuestras hijas, 22 pero ellos ponen una condición para quedarse con nosotros y formar un solo pueblo, y es que nos circuncidemos todos los varones así como lo  hacen ellos. 23 Si aceptamos, sus ganados y todo lo que tienen serán de nosotreos. Hagamos, pues, lo que nos piden y que vivan entre nosotros.”
24 Todos los que salían por la puerta de la ciudad se dejaron convencer por Hamor y su hijo Siquem, y se circuncidaron todos los varones de esta gente.
25 Al tercer día cuando estaban más adoloridos, dos de los hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, tomaron sus espadas y entraron en la ciudad sin peligro, matando a todos los varones. 26 Mataron a Hamor y a Siquem, su hjo, y tomando a Dina de la casa de Siquem salieron. 27 Los demás hijos de Jacob pasaron sobre los muertos y saquearon la ciudad, 28 se apoderaron de sus vacas, ovejas y burros y todo lo que había en la ciudad o en el campo, 29 se llevaron como botín todas las riquezas, sus niños y sus mujeres; saquearon todo lo que había dentro de las casas.
30 Dijo entonces Jacob a Simeón y a Leví: “Me han dejado mal y por culpa de ustedes me odiarán los cananeos y los fereceos. Yo tengo pocos hombres, de manera que si ellos se reúnen, me vencerán y me extyerminarán junto con toda mi gente.” 31 Pero ellos respondieron: “¿Ibamos a dejar que nuestra hermana fuera tratada como una prostituta?

No hay comentarios:

Publicar un comentario