QUE ME BESE CON LOS BESOS DE SU BOCA
Una pareja de enamorados viene a interrumpir la historia sangrienta de Israel. Y no es para hacer una oración en común, como en el Libro de Tobías, que, a su manera, presenta dos novios muy simpáticos y harto creyentes.
En el Cantar, ni siquiera se nombra Dios, siendo que, en los demás libros de la Biblia, se habla de él a cada momento, tanto para bendecir como para maldecir. Pero el Cantar es el canto del amor apasionado. ¿No será ésta una manera de hablar de Dios? Los enamorados, ¿no consideran el amor como algo divino?
Algunos han pensado que se habían reunido aquí cantos de amor que alternaban el novio y la novia en la fiesta de sus bodas. Pero es pura suposició, y es preciso reconocer que nada semejante existió en ninguna cultura del Oriente. Esos poemas no tienen el estilo de canciones populares; tampoco hablan de hijos esperados, en contradicción con toda la cultura israelita y su comprensión del matrimonio.
Así que lo más sencillo es entender el Cantar como lo entendieron los mismos judíos, tan lejos que se remonte a su historia el Cantar nos entrega el mensaje religioso de toda la Biblia al expresar en forma poética la búsqueda del amor.
LA BÚSQUEDA DEL AMOR
Este es el tema común de los poemas del presente libro, los cuales no tienen entre sí una continuidad muy lógica, sino que se suceden como una serie de sueños.
Buscar y volver a encontrar. Este es el doble movimiento del Cantar, inspirado en esto por los anteriores escritos de los profetas (Oseas). El esposo se esconde cuando se le busca, para, al no encontrarlo, la novia lo busque con más ardor; y la novia se ve detenida en su búsqueda del esposo, para que encuentre con más plenitud lo que buscaba. (San Gregorio)
Así que no debemos preguntar: "¿Quién es el Rey y Pastor? ¿A quién representa la novia? ¿Acaso se habla del amor divino o del amor humano? Pues todo amor verdadero viene de Dios y es algo de Dios.
- El poeta piensa muy a menudo en el diálogo de amor de Yavé con su pueblo, como lo diremos.
- También expresa las inquietudes y alegrías del que busca a Dios y ansía experimentar su presencia ya en esta vida.
- También habla para cualquiera que descubre y busca el amor. Que, al entregarse a su novia o a su esposa, experimente junto con ella un "amor divino" que solo es capaz de llenar una vida.