martes, 22 de junio de 2010

54 (53)

3 ¡Oh Dios mío! Sálvame por tu Nombre; hazme justicia por tu poder.
4 Dios mío, escucha mi plegaria, escucha las palabras de mi boca.
5 Porque se alzan en mi contra los soberbios, y los violentos buscan mi muerte; hombres para los cuales no cuenta Dios.
6 Pero a mí, Dios me ayuda, el Señor es apoyo de mi vida.
7 Vuelve el mal contra mis adversarios, destrúyelos, Señor, tú que eres fiel.

8 Y yo te ofreceré de buena gana un sacrificio, y alabaré, Señor, tu Nombre porque es bueno.

9 Pues tú me has sacado de toda angustia, y mis ojos han visto humillados a mis contrarios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario